domingo, 28 de septiembre de 2008

Historia sin propósito: Inconciencia

Todo está negro y vacío, sin sonido alguno. Sellado herméticamente en la nada. Pero aún en la ausencia de la realidad puedo seguir sintiendo. Siento el no sentir.

Poco a poco la oscuridad se va llenando de ruidos visuales e imagenes sabor durazno. También hay algunas palomitas de maíz volando por ahí.

Me despierto. Estoy en el cuarto de mi papá. Mejor dicho en el cuarto que era de mi papá. El cuarto de la juventud de mi padre. En pocas palabras estoy en casa de mi abuela. Estiro mis piernas pero un montón de cosas impiden alcanzar mi objetivo. Me levantó para ver y para mi sorpresa la cama está llena de drogas. Específicamente marihuana, lo que parece ser cocaína y frascos y frascos de sustancias sin determinar. También hay mucha pornografía.

Escucho los pasos de mi abuela subiendo la escalera. Me siento culpable de todo el caos que hay sobre la cama así que metó todo en una vieja caja de zapatos. No sin antes forjar un porro de mota. Absurdo.

Termino de meter todo en la caja y la empujo debajo de la cama. Salto de un lado al otro de la cama. Soy ligero como una pluma manipulada por el viento. Puedo volar y flotar. Me escondo cerca del marco de la puerta y reduzco mi tamaño a la mitad para evitar ser encontrado por mi abue.

Trato de reducir mi tamaño de nuevo, pero es imposible, mis manos están pegadas a mi pecho y mi abuela entra en la habitación. No tarda ni un segundo en encontrarme y se acerca. Sus arrugas parecen zanjas desde mi reducida y alterada perspectiva.

Mi mamá me despierta. Estoy en mi habitación. Me da una bolsa negra y me dice que es urgente que vaya a entregarsela a los vecinos. No reniego mucho y salgo de la casa para cumplir con la tarea.

Está lloviendo. Camino, camino, camino y al doblar la esquina noto que estoy descalzo. En seguida tomo el camino de regreso para ponerme unos zapatos. La sensación de la banqueta mojada contra mis pies desnudos es muy agradable.

No sé para que regresar.

Busco las llaves para abrir la puerta principal y oh sorpresa cuando veo que tampoco llevo pantalones puesto, sólo unos ajustados boxers. De esos anti-imaginación.

Mi madre me abre la puerta, no dice nada, parece una estatua. Entro a mi cuarto, me quitó los zapatos.

¿Tengo los zapatos puestos?

Me acuesto en mi cama y a dormir se ha dicho.

Bip, bip, bip grita mi despertador. Lo apago y veo que se me hace tarde para la cita con mis amigos. Bajo a desayunar y lo único que hay son los espaguetis quemados de la otra tarde.

Hawkwind - Space Ritual



Invadido por una incontenible necesidad de escuchar algo similar a Pink Floyd de la era de Syd Barret me aventuré a buscar grupos catalogados como Space Rock. Estando en eso me tope con Hawkwind, específicamente con el álbum en vivo Space Ritual. Una verdadera joya.

No, Hawkwind no suena a Pink Floyd. El Space Rock no es un sonido, son los temas que maneja los que le dan personalidad. Viajes por el espacio, tramas de ciencia ficción, acompañados de música que te hace viajar al mismo centro de tu mente. Donde verás estrellas, satélites y algunas naves espaciales de paso mientras caes por agujeros negros.

Con canciones tan repetitivas me atrevería a comparar a Hawkwind con el Stoner Rock de Queens of the Stone Age.

El disco no sólo es música, también es poesía intercalada entre los enormes temas (la mayoría arriba de los 6 minutos).

Los temas más alucinantes del albúm se encuentran en su mayoría en el disco 1 como Born to Go, Down Through the Night, Lord of Light (mi favorito), Space is Deep, Orgone Accumulator y Master of The Universe del disco 2.

Todo un viaje.

Descargar Disco 1
01.- Earth calling
02.- BOrn to go
03.- Down through the night
04.- The awakening
05.- Lord of light
06.- Black Corridor
07.- Space is deep
08.- Electronic n°1
09.- Orgone accumulator
10.- Upside down
11.- 10 Secods of forever
12.- Brainstorm

Descargar Disco 2
01.- 7 by 7
02.- Sonic Attack
03.- Time we left this world today
04.- Master of the universe
05.- Welcome to the future
06.- You shouldn´t do that
07.- Master of the universe
08.- Born to go

Homero Simpson dijo una vez que el Rock alcanzó su perfección en los 70's... oh cuanta razón tiene.

sábado, 20 de septiembre de 2008

Historia sin propósito: Cocinando espaguetis

Vierto en una cacerola algunos espaguetis para cocinarlos. Me quedo frente a ellos para cuidarlos pero es tan aburrido que decido poner un poco de música en mi estereo para hacer la espera un poco más amena.

Pongo a Syd Barret a todo el volumen que mis cuadros pueden resistir sin caerse de las paredes. Aunque las figuras de porcelana parecen danzar al ritmo del bajo de Dominoes. Mi cuerpo los acompaña en su inanimado baile. Creo que ellos se mueven mejor que yo.

Recuerdo que tengo unos espaguetis en la lumbre, así que voy a revisar como están. El agua comienza a burbujear. Abro una lata de salsa y se las pongo encima y mezclo. Vuelvo a mi sala cuando Wined and dined comienza.

Quedo hipnotizado por el ritmo del teclado mezclado con la hermosa guitarra de Barret. Pasan y pasan las canciones. Escucho la extrañeza de Effervescing Elephant para luego pasar con la divertida y romantica Here I Go.

Cuando No Good Trying esta comenzando es cuando detecto un olor a quemado. Entonces recuerdo que tengo los espaguetis en la lumbre y corro hacia la cocina para salvarla de un incendio. La cocina está llena de humo, así que apago la flama de la estufa.

Disperso el humo con mis manos a la vez que toso. Pero el humo no desparece. Al contrario parece ir en aumento. Busco la salida de la cocina pero no la encuentro. Sólo sigo caminando por la niebla gris con olor a espagueti quemado. No recordaba mi cocina tan grande.

La única pista que tengo para encontrar la salida es la música de Syd Barret que se escucha desde la sala. La canción sigue y sigue, parece interminable, incluso parece que es más lenta. Parece hasta otra canción. Al poco rato me acostumbro al humo y me siento en el suelo para disfrutar de la canción.

Mis ojos comienzan a irritarse y se ponen llorosos y me arden. Comienzo a gatear por el suelo para encontrar una salida de ahí. Por fin termina la canción y todo comienza a ponerse oscuro. El olor a chamuscado desaparece. Sólo percibo la improvisada y llena de errores If It's in You. Pero esta vez es todo lo contrario a la canción anterior. Esta parece ir de prisa. Mi cabeza da vueltas como si estuviera en un carrusel.

De pronto comienzo a cantar a duo con Syd:

Did I wink of this, I am
yum yummy yum, don't yummy yum yom yom
Yes I'm thinking of this, in steam
skeleton kissed to the steel rail


Quemar espaguetis mientras escuchas los álbumes The Madcap Laughs y Barret puede ser una experiencia... no lo sé... extraña.
Please leave us here
Close our eyes to the octopus ride!

jueves, 18 de septiembre de 2008

Historia sin propósito: Insomnio

Es una tarde calurosa, tú y yo estamos viendo películas malas transmitidas por la televisión abierta. Nada increíble, todo aburrimiento. En un movimiento astuto de mi parte pongo mi mano en tu vientre debajo de aquella blusa roja con lunares blancos. No opones resistencia, sólo noto una pequeña contracción a causa de un cosquilleo, quiero suponer.

Poco a poco mi mano va subiendo mientras tu mano opone resistencia. Al final termino ganando yo, ¿o fue un empate?, ¿o me dejaste ganar?. Antes de lo previsto me encuentro tocando las varillas metálicas de tu sostén a la vez que pregunto con ingenuidad falsa: "¿Qué es eso?". Tú respondes con la misma ingenuidad fingida: "Descúbrelo".

Tus deseos son órdenes.

Miro tu rostro y veo a tus ojos cerrarse, y tus cejas arquearse de placer. Bajo mi mirada y veo el botón de tu pantalón haciendo lo opuesto a tus ojos permitiendome ver tu ropa interior a rayas rosas y azules de tonos pastel.

Abro mis ojos, y me doy cuenta que pasa de la media noche y que mis recuerdos siguen acosandome pero camuflados como sueños. Estoy sólo yo y mi enorme líbido solo comparable en tamaño con la torre Eiffel o con la torre de Pisa (con todo y su característica inclinación).

Trato de volver a conciliar el sueño pero en mi cabeza sólo te puedo ver acompañada de él. Doy vueltas por toda mi cama como las ruidosas manecillas de mi reloj despertador. Ceso mis intentos de dormir, abro mi ventana y enciendo un cigarro con un cerillo. Mi encendedor murió esta tarde.

Mientras expulso el humo de tabaco de mis pulmones, una masa de recuerdos llega a mi mente mientras escucho a los grillos. Recuerdo como en mi infancia creía que ese era el ruido del resplandor de las estrellas en el cielo.

Notó una luz encendida en la casa del vecino y también escucho esa vieja canción que me trae recuerdos de ti.

¿No puedes dejarme en paz en mis sueños ni en mi ventana?

Los recuerdos siguen llegando. Recuerdo las tardes de mi niñez escuchando la radio mientras simulaba ser el disc jockey de la estación local mientras simulaba tocar los viejos acetatos de mi papá en su tocadiscos.

De pronto me acosa otro recuerdo tuyo. De aquella tarde en que llegaste por sorpresa a mi casa presumiendome una lata de cloruro de etilo. Sí, aquel anestésico utilizado para tratar heridas deportivas. Recuerdo como agitabas la lata y como la aplicabas sobre tu viejo sueter rojo para luego aspirarla y succionarla con fuerza.

Al principio me daba miedo intentarlo, pero que carajos, siempre estoy abierto a experiencias nuevas. Nuestra canción estaba puesta en el estereo mientras yo aspiraba y sentía mi mente zumbar yendo de arriba a abajo como un resorte tratando de sintonizar la estación correcta de la realidad mientra me preguntabas: "¿Sientes algo? y yo contestando: "Pues si no es esto lo que debo sentir, entonces no sé que es". Mi cabeza se inflaba como un globo y la música mutaba en seres extraños.

La canción ya no era una canción.

Mis extremidades eran como espaguetis cociendose en la lumbre poniendose cada segundo más y más aguados.

Creo que ya se que comeré mañana.

The Shock Doctrine

Les quiero compartir este corto dirigido por Alfonso Cuarón y Naomi Klein que habla como el miedo, el terror y el shock es utilizado para tener a la población sumisa a las decisiones radicales del gobierno.

Lo que paso recientemente en la ciudad de Morelia me hizó sentir más de cerca toda esta situación más que nunca ya que tengo familiares que viven ahí y además de ser mi estado natal.

La guerra al narco es sólo un invento para tenernos controlados.

No tengo más palabras para expresar mi idea, pero creo que más o menos entenderán mi punto.

Así que mejor, vean el corto.