jueves, 3 de abril de 2008

No puedo...

Hoy me di cuenta que un blog no se puede utilizar como diario privado por obvias razones. Cuando reinaguré este blog el objetivo era postear cosas que me gustarán o me ocurrieran en el día pero es imposible hacer esto último. La gente que me conoce me podría leer y podrían usar mis escritos en mi contra.

No puedo hablar de la USB's que me he encontrado en la escuela.
No puedo hablar de la torta que tome en la cafetería porque nadie la reclamó.
No puedo hablar de la ocasión cuando pusé azúcar en los tanques de gasolina de los coches del estacionamiento de la universidad.
No puedo hablar de cuando cambie el azúcar por sal.
No puedo hablar de cuando me comí toda la comida del refrigerador de uno de mis amigos.
No puedo hablar de mis experiencias románticas o de mis no experiencias románticas o de mis experiencias no románticas.
Ni siquiera puedo escribir travesuras reales.
No puedo decir lo que estaba pensando en el momento que hiciste algo interesante.
No puedo dejar de ser tan ambiguo en mi redacción.
No puedo expresar mis deseos más profundos y enfermos.
No puedo ni siquiera hablar de algo profundo y relevante.

Debo superar mi propia autocensura.

2 comentarios:

Poul dijo...

Que le pusiste azucar!?

Bueno, podrías hacer tu blog privado como hizo Luiz.

No importa, digo al final de cuentas alguién más se preocuparía por la USB que perdió.

Catriela Soleri dijo...

Que bueno saber que no soy la única aprisionada.
Esa es la desgracia de mostrar los blogs a los amigos. O de relacionarse con personas por medio de blogs.

Yo tampoco puedo escribir de muchas cosas, y me siento invadida donde antes era libre.
Hagamos blogs secretos, es la única solución.