domingo, 3 de febrero de 2008

4:37

Me encanta tener un blog, podría decirse que es uno de mis hobbies. El único problema que tengo es que no se me ocurre fácilmente que postear en él.
En estos mismo instantes aún sigo sin tener claro a donde ira este post. El campo de texto del título se encuentra vacío y pidiendome que escriba sobre él. Se me ocurria escribir de nuevo de lo mucho que me gusta una canción como el post pasado, pero se me hace algo repetitivo. Podría escribir sobre las sensaciones que tengo todas las mañanas (o a veces tardes) al subir al camión para ir a la escuela. ¿Para que tener que elegir de entre las dos?
Me encontraba sentado en la parte de atrás de la ruta 62, cuando de pronto mis audífonos me susurraron una canción de los Beatles, I want you (She's so heavy).
En esos instantes la canción sono, no se como definirlo, me sono más profunda. La repetitiva melodía y la constante repetición de la letra I want yoouuuuu me hizo recordar a la vida cotidiana misma. Aquellos kilobytes convertidos en sonido me recordaron la insoportable rutina que llevo a diario, el tormento que puede llegar a ser desear algo o alguien todos los días y tener que soportar el fracaso de sólo poder verla de lejos (así es, me recordo al maldito, maldito amor, ¿o era solo el deseo?). La monotonía y tranquilidad de la canción se rompe cuando se escucha estrepitosamente el She´s so... Heaaaaaavyyyyyyyeeeee aahhhhhh!!!! y el clímax llega en el minuto 4:37 cuando la canción estalla y la melodía comienza a repetirse una y otra y otra vez hasta culminar en un inesperado y frío silencio, tan callado como si alguien le hubiera destrozado la sien a la rola con un disparo.
En esos mismos momentos, me sentí como el protagonista de un videoclip, sentado ahí tranquilamente, deseando que la canción durara eternamente. Sentí deseos de quedarme en el camión y repetir una y otra vez todas estas sensaciones, pero al final de la tarde fui devorado de nuevo por la tediosa y gris sustancia de mi horrible, horrible rutina.

1 comentario:

Iconnè dijo...

Creo que solo entiendo a la mitad lo que dices... y creo que la otra mitad es lo que también me pasa... me sentí así al escuchar "Winning a battle, losing the war" hace unos días...

Así se usan los blogs, sin saber que escribir... las palabras simplemente fluyen desde dentro de ti hacia los dedos y quedan plasmadas en los campos de texto...

Jamás pienses que escribir, solo escríbelo. Jamás pienses de que hablar, solo habla. Recuerda que ya he descubierto que hacer planes es estúpido